¿De qué hablamos cuando decimos moda lenta? Pues bien, te contaremos que es más que una tendencia o un método, es un modo de pensar y concebir la moda desde un hacer consciente, ético y respetuoso con el medio ambiente, los trabajadores y los consumidores.

Este concepto surge, como una reacción al fast-fashio o moda rápida, con la finalidad de reducir el impacto social y ambiental que esta última genera año con año. El cambio que porpone el slow fashion no solo involucra a diseñadores y marcas, que buscan generar cambios hacia un futuro más verde, sino que también hace un llamado a la sociedad.

El slow fashion es la manera de pensar, hacer y consumir la moda de manera consiente e intencionada, fomentando el cuidado de los procesos de producción, buscando asegurar la cadlidad de cada producto creado para que sean perdurables y sostenibles a lo largo del tiempo. En pocas palabras busca un respiro ante la excesiva producción y el consumo desmedido, que ha convertido a la moda en la segunda industria más contaminante del planeta.

Las bases en las que se apoya la moda lenta son:

  • Calidad, durabilidad y longevidad de las prendas.
  • Tiempos de producción más lentos.
  • Salarios más justos
  • Reducción en la huella de carbono generada por cada prenda.
  • Zero waste (cero desecho)
  • Producciones acotadas y atemporales.